Y entonces llego Giotto…

Hay dos momentos en la historia del material escolar fungible relacionados con esta marca.

Y es que aun recuerdo cuando en el colegio trabajábamos con rotuladores de otras marcas. Siempre se nos afirmaba que las puntas estaban reforzadas y que no se hundían con la presión que ejercita un niño a la hora de dibujar sus primeros trazos. Pero nunca se cumplían las expectativas que nos decían a la hora de la práctica. Las puntas siempre, y digo siempre, se hundían.

La realidad es que hasta que no llegaron los tres tipos de rotuladores que tiene la marca Giotto (perteneciente a la empresa italiana Fila) no teníamos unos rotuladores con ese nivel de resistencia.

Por un lado nacieron Turbo Color y Turbo Maxi, que son los rotuladores con el formato más clásico de esta marca. Los Turbo Color gozan de una punta fina, al igual que su cuerpo, para trabajar el trazo fino y que el niño pueda ha empezar a perfilar de una forma más sencilla. Por otro lado los Turbo Maxi por el contrario están enfocados más al sector más infantil. Con una punta gruesa para que el niño pueda empezar a realizar sus primeros trazos de forma sencilla.

El tercer tipo, y los últimos en nacer, son los Be-Bè. Estos rotuladores gozan de una punta gruesa extra reforzada y son super lavables, aunque según las especificaciones técnicas de Giotto todos sus modelos son lavables a un alto nivel estos rotuladores al estar enfocados a los infantes de menor edad están fabricados con un tinta Super lavable.

A todo esto se le tiene que unir que son rotuladores que aguantan un tiempo considerable sin que se sequen cuando el niño los deja sin capuchón.

El segundo momento en el que se nos cambio parte de la historia fue con su plastilina. Mientras que la otra gran marca de plastilina ( Jovi) sus pastillas están realmente duras, cuando se abre el envoltorio de las mismas, la plastilina de Giotto esta realmente blanda haciendo que el niño no tengo que golpear la pastilla (o que la profesora/o tenga que meterla en el microondas para ablandarla). Otro factor que suele llamar la atención la primera vez que se trabaja con ella es el olor. No tiene el típico olor a plastilina ya que viene perfumada.

Al igual que con los rotuladores no existe objeciones, normalmente con la plastilina de esta marca los noveles marcan dos:

1. Los colores de las plastilinas no son los clásicos. Son unos colores más llamativos y esto hace que determinados profesores sigan optando por la Jovi pese a la ventaja de la facilidad de manejo para los niños.
2. Cuando se trabaja con esta plastilina, si bien no deja residuos, pero sí deja una pequeña capa como de grasa en las mesas donde se trabajen con ella. Si bien es cierto que con un trapo un poco húmedo se quita sin más problema, hay gente que no les agrada lo más mínimo esta característica del producto.

Mis recomendaciones:

Sobre los rotuladores solo me cabe decir una cosa, para mí son los mejores del mercado. Jamás he visto un rotulador que aguante con esa calidad los impactos y que soporte tan bien la intemperie sin secarse rápidamente.
Sobre la plastilina tengo afirmar que merece la pena el probarla. Aun recuerdo cuando era chico ¡como había veces que me dolían los dedos de haber estado moldeando plastilina!. Creo que es el momento de que los niños disfruten de un buen producto sin dolores de dedos y sin que la profesora/o deba de hacer inventos para ablandar el producto. Sin duda es un producto que recomiendo activamente.

Os dejo el link de Giotto (Fila Hispania) donde podréis ver su catálogo.


Un cálido saludo.